Alimentación saludable y actividad física

Una alimentación saludable combinada con actividad física nos ayuda a mantener un óptimo estado de salud y prevenir el desarrollo de múltiples enfermedades, como las enfermedades del corazón, diabetes y cáncer de mama.

¿Qué es una alimentación saludable? Es aquella que nos aporta todos los nutrientes necesarios para cubrir nuestras necesidades energéticas y nutrimentales para mantener en óptimas condiciones a nuestro organismo, al mismo tiempo que es sostenible con el medio ambiente y personal y socialmente satisfactoria.

La dieta mexicana siempre ha tenido como base la milpa, es decir, el policultivo en donde se produce maíz, frijol, calabazas, chiles, tomates y hierbas de olor. Esta dieta tradicional se ha enriquecido a lo largo del tiempo por diversas culturas, y actualmente es una dieta rica en productos vegetales, granos y cereales y pocos alimentos de origen animal. Por sus características, la dieta tradicional mexicana es considerada una dieta completa, nutritiva y saludable para nuestra población y el planeta.

En ESMaestras hemos investigado la relación de los diferentes patrones de dieta con la salud de la mujer mexicana. Entre los principales resultados, hemos encontrado que la dieta mexicana se ha visto modificada sustituyendo alimentos tradicionales por algunos productos industrializados como el refresco. Esta “modernización” de la dieta donde el consumo de refrescos es frecuente, se ha asociado a padecimientos como la hipertensión y el aumento de peso.

Cuando hablamos de actividad física nos referimos a cualquier movimiento voluntario que implica un gasto de energía (limpiar, caminar, hacer las compras), y por ejercicio como el aumento de la movilidad del cuerpo, pero de manera planeada y repetitiva (correr, natación, pesas).

En un estudio del Instituto Nacional de Salud Pública, investigadoras identificaron que por cada tres horas de actividad física moderada a la semana hay una disminución de hasta el 10% del riesgo de cáncer de mama.

En ESMaestras, hemos observado que las mujeres con un diagnóstico de cáncer de mama dedicaron menos tiempo a la actividad física recreativa en comparación con las maestras sin un diagnóstico de cáncer.

Comenzar es el paso más difícil. Puede haber obstáculos mentales, laborales, familiares y sentimientos de frustración que superar. Pero nunca es demasiado tarde para empezar a estar activa. Cualquier tipo de actividad física es mejor que ninguna. Comienza en donde estás, toma un poco de tiempo y un día a la vez. Progresivamente podrás aumentar el tiempo e intensidad de la actividad física.

Prevención de enfermedades del estilo de vida

Cáncer de mama

  • El cáncer de mama es un cáncer que se forma debido a un crecimiento anormal de las células de las mamas.
  • En México, el cáncer de mama es el cáncer más frecuente y la primera causa de muerte por cáncer en mujeres.
  • Existen distintos factores de riesgo asociados al desarrollo de este tipo de cáncer, algunos son hereditarios y otros están relacionados al estilo de vida. Realizar poca actividad física, tener sobrepeso u obesidad, consumir alcohol en exceso, y el uso prolongado de hormonas en la postmenopausia son factores que aumentan el riesgo de padecer cáncer de mama.
  • Toda mujer a partir de los 40 años debe de realizarse una mastografía (examen de exploración de los senos) y tener seguimiento por su médico de cabecera. Si tiene algún factor de riesgo personal o antecedentes familiares, comparta la información a su médico para que elaboren un plan de estudios. 
  • La detección temprana de cáncer de mama es el primer paso hacia la prevención. Si usted nunca ha acudido a una mastografía o no le han realizado el examen en los últimos dos años, comience con una autoexploración. (Link a página de la secretaría de salud sobre autoexploración de mamas: https://www.gob.mx/salud/acciones-y-programas/cancer-de-mama-autoexploracion-de-mamas). 
  • Actualmente en ESMaestras estamos realizando estudios sobre la actividad física y el consumo de carbohidratos y cómo estos factores pueden relacionarse con el riesgo de tener cáncer de mama. Al momento sabemos que:

Diabetes

  • La diabetes es una enfermedad crónica caracterizada por una falta de respuesta por parte de las células a una hormona llamada insulina, la encargada de regular los niveles de glucosa en la sangre.
  • Según datos de la ENSANUT 2020, el 10.3% de la población mexicana cuenta con diagnóstico de diabetes, esto equivale a 8 millones 600 mil personas.
  • Si bien existen distintos factores de riesgo asociados al desarrollo de diabetes los principales son: sobrepeso, padres o hermanos con diabetes, sedentarismo, y el antecedente de padecer diabetes durante el embarazo.
  • Hasta un 70% de los casos de diabetes se pueden prevenir adoptando estilos de vida saludables como: realizar actividad física (al menos 3 veces a la semana durante 30 minutos) y llevar una alimentación saludable (disminuir el consumo de azúcares refinados, grasas saturadas). 
  • En ESMaestras hemos estudiado la relación entre el consumo de refrescos azucarados y la incidencia de diabetes. En este estudio encontramos que consumir refresco de manera frecuente aumenta el riesgo de tener diabetes en un 32%.

Enfermedades del corazón

  • Es un grupo de enfermedades que involucran al corazón y a los vasos sanguíneos, estrechando estos vasos provocando que la cantidad de sangre recibida por el corazón sea menor.
  • En México, las enfermedades del corazón son la primera causa de muerte en la población adulta. Las enfermedades isquémicas y las enfermedades hipertensivas son las principales enfermedades cardiacas causantes de las defunciones.
  • Existen distintos factores de riesgo asociados al desarrollo de este tipo de enfermedades como el sedentarismo, el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol, la alimentación poco saludable, y el descontrol de enfermedades concomitantes como la hipertensión arterial, la hiperlipidemia (cantidades elevadas de colesterol o triglicéridos en sangre), sobrepeso y la obesidad.
  • En ESMaestras hemos prestado especial atención a la identificación de los factores de riesgo asociados a este tipo de enfermedades. En un estudio con datos de ESMaestras, encontramos que el consumo frecuente de refrescos daña las arterias carótidas, las encargadas de llevar sangre al cerebro, por lo que disminuir el consumo de estos productos en conjunto con una dieta saludable y actividad física puede prevenir el desarrollo de enfermedades cardiacas.